Bienvenidos al número de Julio de 2003 de LinuxFocus
Linux nos ha proporcionado siempre la libertad de mirar el código fuente y de compartir el conocimiento, la libertad de aprender de él y la libertad para cambiarlo según nuestras necesidades, la libertad para usarlo en donde y en la manera que mejor nos parezca.
En estos momentos parece, sin embargo que más y más personas intentan entrar en la arena de Linux, personas que no tienen ni conceptos morales ni buenos modales, y que mucho menos saben cuál es el espíritu que mueve a Linux. El dinero es lo único que les interesa.
¿Se han ido las épocas en las que los programadores escribían sus códigos y se reunían plácidamente durante pequeñas conferencias para dar paso a las peleas en las cortes?.
El mundo está en constante cambio al igual que Linux. Si esto es para bien o para mal, solamente el futuro podrá decírnoslo, pero mientras exista gente que mantenga vivo el espíritu y desee hacer de Linux el mejor sistema operativo, tengo la esperanza de que el espíritu original se mantendrá vivo y todas esas personas tendrán que irse.
-- Katja Socher --